Estadio Insular: sin pista de atletismo es como se disfruta del fútbol

Hace unos días el presidente de la UD Las Palmas declaró, abiertamente, que volvería al viejo Insular y que se apuntaría a una plataforma, que de existir, apoyase el regreso al antiguo campo amarillo.

En un primer momento, el estadio fue creado para el Marino Fútbol Club (uno de los equipos que, en 1949, se fusionaría con el CD Gran Canaria, el Atlético Club, el Real Club Victoria, y el Arenas Club, para fundar la UD Las Palmas), por eso al principio el estadio se llamaba Campo del Marino, aunque su nombre inicial era el de Estadio Las Palmas.

Tras siete meses de trabajo, con turnos de incluso 24 horas, se inauguró el 25 de diciembre de 1944 con un partido entre la Selección de Las Palmas y la Selección del Puerto. En el momento de su inauguración, el recinto contaba con una capacidad de 8.000 espectadores. En 1951 se amplió hasta llegar a las 22.000 plazas (con las que cuenta actualmente) con unas medidas de 106x68 m, tras la compra del estadio por parte del Cabildo de Gran Canaria.

Pocos meses después de fundarse la Unión Deportiva Las Palmas, el Estadio Insular acogió el primer partido disputado por el equipo amarillo, celebrado el 9 de octubre de 1949 con el Marino como adversario.

El último partido disputado por la UD Las Palmas en el Estadio Insular fue el 29 de junio de 2003, frente al Elche CF, equipo "talismán" para el equipo amarillo (consiguió un ascenso a Segundo y otro a Primera ante los alicantinos). Este encuentro acabó con 4-1 favorable a los canarios.

El viejo estadio grancanario acogió varios partidos de la Selección Española, que visitó por última vez el Estadio en 1996. La roja disputó cuatro partidos en el Estadio Insular. El primero de ellos frente a Yugoslavia en 1972 cuando España disputaba la fase de Clasificación para el Mundial del 74. Más tarde, se jugaron encuentros amistosos frente a la URSS en 1986. México en 1993 (1-0) y el citado ante Noruega en 1996.

Actualmente, aunque sigue en pie, el estadio se encuentra en ruinas y más se parece a un pastizal que a un terreno de juego ya que ha sido abandonado por el filial de los canariones, esperando a ser derribado próximamente.